Cómo el ‘pozi’ se convirtió en patrimonio gastronómico de Buriatia (Receta)

Olga Brovkina
El ‘pozi’, un plato tradicional cocinado en la República de Buriatia, requiere exactamente dar 33 pellizcos para su elaboración. Hay una razón especial para ello.

Los orígenes del pozi se remontan a 400 años atrás. Se cuenta que el jefe de los lamas tibetanos invitó a los buriatos a su casa para introducirlos en el budismo, y los agasajó con unos buzi (carne envuelta en masa).

Las bolas de carne picada con manteca de cerdo se envolvían en masa, dejando un pequeño agujero alrededor del cual se hacían 33 pellizcos. ¿Por qué 33? Ese era el número exacto de pliegues en la ropa de los sacerdotes tibetanos.

Después de esta visita a los lamas, los buriatos ordenaron preparar los buzi (más tarde - pozi) exactamente de la misma forma en que los preparaban los monjes tibetanos. Para el picadillo debía utilizarse la carne de cinco animales: camello, oveja, cabra, caballo y vaca. A la carne picada se le añadía también manteca de cerdo, cebolla silvestre y ajo. Este conjunto de ingredientes se conserva para la posteridad y se transmite de generación en generación.

Hoy en día, el pozi encarna la sabiduría del pueblo buriato. Cuando sus lejanos antepasados elaboraban el plato, tomaban como base la yurta. En una vivienda de forma redonda en el centro, había un hogar, con humo que salía de un agujero en el techo. A pesar de su sencillez, la yurta está ingeniosamente dispuesta: en invierno, la temperatura interior es cálida, y en verano, notablemente fresca.

El pozi buriato se ha convertido en un éxito con canas. Al enterarse de que este plato se cocinará para una celebración, nadie se atreve a dejarla pasar. Además, es tan adorado por los habitantes de la República de Buriatia, que incluso hay poemas, festivales, varias películas y reportajes dedicados a él. Es más, el pozi tiene incluso su propio himno nacional, un monumento y un premio anual, establecido por la asociación de restauradores de Ulán-Udé, la capital de la República.

Probemos a cocinar este plato buriato de carne, que se parece mucho al jinkali o manti en su aspecto y receta. También se prepara con masa sin levadura, que se utiliza para envolver la carne picada. Así que, ¡comencemos!

Ingredientes para 8 raciones (o 24 ‘pozi’)

Masa:

  • Agua hervida - 150 ml
  • Harina - 500 g
  • Huevo - 1 ud.
  • Sal - 1 g
  • Relleno:
  • Ternera - 500-700 g

Relleno:

  • Manteca de cerdo - 30-50 g
  • Cebollas - 1-2 cabezas
  • Ajo - al gusto
  • Sal - al gusto
  • Una mezcla de pimientos - al gusto
  • Agua - 1/2 taza
  • Perejil o cilantro - para el relleno

Preparación:

Para empezar, vamos a preparar la masa, ya que necesita reposar 30 minutos antes de empezar a trabajar con ella. Tamizar toda la harina en un bol.

Luego hay que hacer un pequeño hueco en la masa y verter un poco de agua, antes de añadir un huevo y una pizca de sal.

Mezclar la masa con cuidado y meticulosamente con las manos hasta que se convierta en una bola elástica, pero sin que quede demasiado dura. Envuélvela en papel celofán durante 30 minutos.

Mientras la masa reposa, vamos a preparar el relleno. Para el relleno, dicen, la carne debe ser siempre cortada en dados con un cuchillo, y no picada en una picadora de carne. Pero yo no tengo cuchillos tan afilados en casa, así que utilicé carne picada.

Cortar las cebollas en dados pequeños y echarlas en un bol con la carne picada. Sazona los ingredientes con especias y sal.

No nos olvidemos de la manteca de cerdo. Debe estar completamente congelada, antes de utilizar un rallador fino para rallarla. Añadir un poco de agua o caldo, para que quede más jugoso.

Después, hay que mezclar cuidadosamente el relleno con una cuchara hasta conseguir una masa de carne homogénea. El relleno para el pozi está listo.

Ahora es el momento de dar forma al pozi. En primer lugar, hay que dividir la masa en muchas bolas pequeñas. Si es necesario, se puede utilizar una porción adicional de harina.

Cada bola debe ser enrollada en forma de una torta plana, pero el centro debe ser ligeramente más denso, y los bordes más finos. El tamaño aproximado del pozi terminado es de 5-8 cm.

Poner 50-70 gramos de carne picada en el centro de la torta plana. Con el pulgar y el índice, se moldea la masa con pellizcos superpuestos, dejando un pequeño agujero en el centro, por el que saldrá el vapor. Dar forma a los pozi de esta manera uno tras otro.

Para la cocción de los pozi, he utilizado una olla a vapor normal. Tarda unos 15 minutos.

Nuestros pozi están listos. Se pueden adornar con perejil o cilantro, así como con salsa de tomate y crema agria.

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