Rustam, de 25 años, de Ufá, sobrevivió a un terrible desastre cuando su cuartel del ejército se derrumbó el 12 de julio de 2015. Considera que esta fecha es un “segundo cumpleaños”. Veinticuatro de sus compañeros murieron aquel día, pero a pesar de estar enterrado bajo los escombros toda la noche, él fue rescatado. Pagó un precio, sin embargo; perder ambas piernas. Sin embargo, Rustam no se rindió. Hoy en día, juega al hockey sobre hielo y escribe un blog muy popular. Hablamos con Rustam acerca de su amor por los deportes y su recuperación de aquella tragedia.
“Practiqué deportes antes de unirme al ejército, pero no profesionalmente, sólo por diversión. Hice atletismo durante seis años y luego levantamiento de pesas por otros cuatro años”, contó Rustam a Russia Beyond.
Después de la tragedia, Rustam recibió la propuesta de jugar a hockey sobre hielo y aceptó. “Antes nunca me había interesado por el hockey y nunca había jugado; ni siquiera conocía las reglas. Pero tenía que hacer algo después de mis lesiones; lo principal era no quedarme en casa”.
Hoy en día, el hockey sobre hielo es la principal actividad de Rustam, y su equipo participa en varias competiciones y a menudo viaja al extranjero para asistir a torneos europeos. En 2017, el equipo de Rustam ganó la Copa Continental de Europa de hockey sobre hielo en trineo, y se llevó una medalla de bronce en el Campeonato de Rusia, así como la medalla de oro en los Campeonatos Europeos de Polonia y el Abierto de Malmö de 2018, en Suecia.
Rustam se mostró muy satisfecho con la victoria del equipo nacional ruso de hockey sobre hielo en los Juegos Olímpicos de Pyeongchang. “Estoy orgulloso de que,a pesar de las sanciones y prohibiciones, nuestros atletas no se rindieron. Al contrario, demostraron que somos una gran nación deportiva”. Rustam dice que participar en los Juegos Olímpicos y Paralímpicos es su meta en la vida.
Rustam tiene 118.000 seguidores en Instagram, donde habla mucho de su vida. “El objetivo principal de mi blog es demostrar que, no importa el desafío, se pueda superar y cambiar las cosas para mejor. Quiero demostrar que la discapacidad no es una sentencia de prisión, sino una nueva página en una nueva vida, con sus propias aventura”.
Con sus videos Rustam intenta animar a la gente. “La vida es hermosa, pase lo que pase. Siempre les digo a mis lectores que uno no debería quejarse y desperdiciar su vida; los 24 hombres que murieron cuando el cuartel se derrumbó hubieran estado muy contentos de estar en su lugar o en el mío. Pero están bajo tierra. Creo que es una buena razón para no rendirse”.
Muchos seguidores dicen que Rustam los inspira. “Recibí cartas de personas que decían que les impedía cometer el peor error de su vida: suicidarse. Es muy hermoso saber que mi ejemplo ayuda a otros a no darse por vencidos; solo eso ya hace que valga la pena sobrevivir y luchar”.
Los seguidores le preguntan a Rustam sobre su vida cotidiana. Muestra los aparatos que tiene en su apartamento como, por ejemplo, aparatos especiales para ayudarle a ducharse. Además, Rustam va por Ufá comprobando lo bien que la ciudad está adaptada a las necesidades de las personas con discapacidades. En este video Rustam habla de cómo usa su coche.
“Pedí unos controles manuales en Moscú después de comprar el auto. Son muy buenos, equipo alemán de alta calidad, y han hecho mi vida un millón de veces más fácil”. Pero Rustam admite que aquel equipo resultó bastante caro.
Una de las fuentes de inspiración más fuertes en la vida de Rustam es su esposa, Indira. “Puedo hablar sin parar sobre mi esposa; es increíble. Me salvó y me ayudó a superar aquella tragedia. Cuando levábamos saliendo cinco años, y ella se quedó conmigo y no temió aceptarme con mi discapacidad”, dice Rustam.
Rustam confiesa que tenía miedo de que Indira lo dejara. Después de despertar del coma, cuando pudo hablar, le dijo que si ella quería podía irse. “Ella me respondió que, con piernas o sin ellas, me amaba mucho y nunca me abandonaría. Después de estas palabras, se convirtió en mi motivación más fuerte para luchar por mi vida y mi futuro”.
Rustam dice que fue Indira quien lo salvó. Siempre estaba a su lado: solía alimentarlo con una cuchara en la unidad de cuidados intensivos y lo cuidaba como si fuera un bebé. “La adoro y todo lo que he logrado hasta ahora es gracias a ella”. Recientemente, la pareja tuvo una hija.
“El apoyo de los más cercanos y queridos es muy importante en estas situaciones. Yo digo a todos que una persona es capaz de lograr muchas cosas, pero cuando otros creen en él, es capaz de lograr lo imposible. Indira creía en mí, creía que podía salir adelante y superar mis dudas, mis miedos y todo mi dolor. Su apoyo y su fe me dieron alas”.
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