El mariscal soviético Iósif Stalin (a la derecha) conversa con el primer ministro británico Winston Churchill (en el centro). 1945.
SputnikEl 31 de marzo de 1954, la Unión Soviética envió una nota oficial a los gobiernos de Estados Unidos, Gran Bretaña y Francia, solicitando el ingreso en la OTAN para la “consolidación de la paz mundial”.
En Occidente se rechazó categóricamente la iniciativa soviética. Se creía que los rusos querían socavar la alianza desde dentro y expulsar a los estadounidenses de Europa.
No obstante, se dijo a los soviéticos que, en principio, era posible entablar conversaciones sobre esta cuestión. Para ello, debían retirar inmediatamente sus tropas de Alemania y Austria, eliminar sus bases militares en Extremo Oriente y firmar un acuerdo de desarme. Sin embargo, estas condiciones fueron consideradas inaceptables por la URSS.
El mariscal soviético Iósif Stalin (a la derecha) conversa con el primer ministro británico Winston Churchill (en el centro). 1945.
SputnikTras el fracaso de las negociaciones, los dirigentes soviéticos lamentaron que los aliados occidentales promovieran la distensión en las relaciones internacionales sólo con palabras, no con hechos. Y Moscú no tardó en preocuparse. Al año siguiente, la URSS estableció su propia alianza político-militar, la Organización del Tratado de Varsovia.
Síguenos en nuestro canal de Telegram: https://t.me/russiabeyondes
LEE MÁS:¿Cómo de poderosa era la ‘OTAN soviética’?
La ley de derechos de autor de la Federación de Rusia prohíbe estrictamente copiar completa o parcialmente los materiales de Russia Beyond sin haber obtenido previamente permiso por escrito y sin incluir el link al texto original.
Suscríbete
a nuestro boletín
Reciba en su buzón el boletín informativo con los mejores artículos sobre Rusia: