En la época soviética, la profesión de auxiliar de vuelo se consideraba muy prestigiosa, sobre todo en los vuelos internacionales. No mucha gente utilizaba aviones, y sólo unos pocos elegidos viajaban al extranjero. A menudo se trataba de la élite de diversos ámbitos. Además, la posibilidad de viajar al extranjero como parte de su trabajo también era una oportunidad única para los ciudadanos soviéticos. En aquella época sólo había una compañía aérea, Aeroflot. El uniforme de las azafatas cambiaba cada pocos años, y los diseñadores tenían en cuenta las tendencias de la moda.
La primera azafata de la Unión Soviética fue Elsa Gorodetskaia, de 20 años. Trabajó en el vuelo Moscú-Asjabad (Turkemnistán) el 5 de mayo de 1939. Tuvo que comprar la vajilla y la comida para los pasajeros en el armario y cargarla ella misma en el avión. Como no era uno de los empleos en nómina, al principio trabajó como camarera (se cree que era tendera). Después del vuelo, tenía que limpiar ella misma la cabina. Fue la única de su clase durante dos meses, y luego la ascendieron a auxiliar de cabina en otras rutas. Hasta finales de 1939 no se estableció oficialmente la profesión de auxiliar de vuelo. Es cierto que no tenían uniforme (a diferencia de los pilotos), sólo debían parecer estrictos.
Después de la guerra los auxiliares de vuelo recibieron un uniforme especial, que incluía un traje de lana, zapatos, boina, abrigo de piel, gorro con orejeras, botas de fieltro, chanclos, guantes y otras cosas. Por regla general, los trajes eran simplemente de colores oscuros y las blusas de seda. Pero si faltaba el uniforme, se podía llevar "parte de arriba blanca y parte de abajo oscura".
El primer uniforme obligatorio de Aeroflot apareció en 1954 para los vuelos internacionales. Fue diseñado por la Casa de la Moda de toda la Unión en Moscú, basándose en las tendencias de la época. Las chicas llevaban trajes de lana azul oscuro con fedora, capa, zapatos y guantes. Los trajes de los hombres eran casi exactamente iguales a los uniformes de los pilotos. En los años 60, todos los vuelos empezaron a tener azafatas uniformadas. Estaba relacionado con el rápido desarrollo de la aviación civil: había aeropuertos y aeródromos en cientos de ciudades de la Unión Soviética.
En 1962, al traje azul se añadió un traje de verano gris claro. En 1968 el sombrero se complementó con un pichi: ¡la última tendencia de moda!
Pero los años más coloridos fueron los 60. Las auxiliares de vuelo vestían uniformes de color carmesí con botones dorados. También llevaban delantales azules con motivos folclóricos.
Luego llegó el uniforme de desfile de Aeroflot: azul con un amplio ribete blanco. Y cuando se pusieron de moda los jerseys de cuello alto, sustituyeron a las austeras camisas blancas.
Al mismo tiempo, Aeroflot empezó a volar con más frecuencia a países cálidos y, especialmente para esos vuelos, los diseñadores ofrecieron su propia línea de uniformes, vestidos y trajes de manga corta. En los años 70 eran azules y rojos, y en los 80 marrones.
Los colores del uniforme eran el rojo y el azul.
Y todavía los colores principales del uniforme de Aeroflot eran (y siguen siendo) el rojo y el azul, aunque los estilos van cambiando. Así, especialmente para las azafatas que trabajaban para los invitados de los Juegos Olímpicos de Moscú, se cosía un uniforme azul con faldas acampanadas.
El último uniforme soviético se introdujo en 1986. La versión de invierno incluía un gorro y un chal rojos, mientras que la de verano era un vestido azul cielo.
Cuando la Unión Soviética se derrumbó, Aeroflot transportaba más de 140 millones de pasajeros al año (tanto en vuelos nacionales como internacionales). Hasta el día de hoy, la aerolínea ha conservado sus colores característicos en los uniformes de sus auxiliares de vuelo.
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