La tormenta Goni, formada en el océano Pacífico, provocó el desbordamiento de ríos e inundaciones en la región de Primorie, en el lejano oriente de Rusia, tras dos semanas de intensas precipitaciones fuera de la norma. En la mayoría de los ríos, el nivel de las aguas alcanzó hasta los siete metros, luego de fuertes e ininterrumpidas lluvias que acumularon casi dos meses del límite histórico de la temporada, notificó hoy el Centro regional hidrometeorológico.
Goni afectó una parte de los territorios del noreste de China y algunas zonas de Japón quedaron bajo las aguas.
En el lejano oriente ruso, el huracán provocó inundaciones en varias regiones de Primorie, donde se declaró situación de emergencia y fueron evacuados sus pobladores.
Centenares de viviendas, carreteras, caminos y sembrados fueron sepultados por las aguas, explicó el jefe de la dirección del centro de pronósticos, Boris Kubai, citado por la agencia TASS.
Según la defensa civil regional, permanecen anegados unos 46 territorios de Primorie. La situación climatológica se mantiene crítica en los alrededores del río Razdolnaya, donde el nivel de las aguas llega a 3,2 metros, un registro considerado peligroso por los expertos de clima.
Con alarma, la administración del distrito cabecera de Ussurisk informó que los animales del zoológico local Isla Verde siguen atrapados en las jaulas, sobre todo los depredadores de gran tamaño como los osos. Las aguas cubren la instalación hasta 1,5 metros.
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Publicado originalmente en Prensa Latina
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