En la época soviética, la mayoría de las “comunidades dormitorio” de las grandes ciudades tenían este aspecto: bloques de pisos de hormigón monocromos y calles de asfalto gris. En verano se diluían con el verdor, mientras que en invierno la paleta se refrescaba con la nieve.
Sin embargo, actualmente los barrios residenciales tienen un aspecto diferente. Los extranjeros se preguntan a menudo por qué las ciudades rusas tienen tantos edificios residenciales de colores.
En Moscú también se pueden encontrar brillantes edificios nuevos...
Y en San Petersburgo...
Y en Vladivostok...
Y en Novosibirsk
Las viejas casas de hormigón o ladrillo se ceden con bastante frecuencia a los grafiteros para que las decoren.
Hay varias razones para las innovaciones de color en Rusia. En primer lugar, los funcionarios y promotores piensan que es "más bonito". Se critica la arquitectura monocromática en tonos apagados.
"¡Hermosa casa!", dice sobre otro nuevo edificio de colores brillantes de Rustam Minnijánov, Presidente de la República de Tatarstán. "Si no estuvieran esos colores, los balcones, sería algo sombrío y sin interés".
"Con un entorno tan 'gris', se produciría un drástico descenso de la productividad en los emplazamientos industriales, en el entorno residencial -las tasas de natalidad- y en los establos -los rendimientos lácteos-", se hizo eco el responsable de Tatarstán, un funcionario de arquitectura de la ciudad de Naberezhnie Chelni.
Sin duda, los colores vivos son apropiados para edificios independientes (como este hospital infantil de Moscú). Pero cuando toda una plaza está pintada con muchos colores brillantes diferentes, es más probable que cause irritación.
Por cierto, se cree que los parques infantiles y otras instalaciones para niños deben ser necesariamente de color.
"Los esquemas de color de las escuelas y jardines de infancia son aprobados por los funcionarios, incluso nos proporcionan su propio libro de preferencias. A veces tenemos que coordinar durante mucho tiempo, y siempre son colores muy vivos", dice el propietario de una empresa de construcción de la región de Moscú.
Pero mientras que en Moscú o Kazán las casas de colores vivos son una cuestión de gusto, en el extremo norte se consideran casi una necesidad. La mayor parte del año, los habitantes del norte ven un paisaje monocromático en blanco y negro, que sólo se diluye con una escasa vegetación verde durante un breve periodo de tiempo en verano. Estos paisajes pueden hacer que la gente se sienta deprimida, por lo que el ojo necesita colores brillantes.
En las regiones del norte, donde el clima es duro, la gente pinta las casas con colores vivos desde finales de los años 80. Por ejemplo, Salejard, en el Círculo Polar Ártico (foto de arriba), y Anadir, en Chukotka (foto de abajo), están llenas de color.
Las casas de colores también ayudan a orientarse durante las tormentas de nieve. Esto es especialmente cierto para Norilsk, por ejemplo.
En Norilsk, los números de las casas y los nombres de las calles también se escriben muy grandes con este fin.
Las fachadas de las casas del puerto marítimo internacional más septentrional de Rusia, Dudinka, también se han pintado con los colores más increíbles.
En Sajalín, el problema de la navegación se ha resuelto con la ayuda del arte callejero. En uno de los pueblos de la isla hay un montón de calles con casas idénticas; los murales luminosos ayudan a no perderse y a encontrar fácilmente el edificio adecuado.
"El deseo de dar color a la arquitectura está relacionado con la psicología del pueblo soviético, que todavía hoy toma decisiones clave: durante mucho tiempo, el pueblo soviético vivió en un entorno de "escasa diversidad", en un ambiente gris monocromo. Ha llegado el momento de la compensación de colores", afirma el renombrado arquitecto ruso Borís Bernaskoni.
Sin embargo, el arquitecto advierte: "El color es algo fuerte. Hay que tener mucho cuidado con ello, de lo contrario puede provocar un desequilibrio". Según él, un grave problema de la planificación urbana es la falta de un filtro experto que ayude a encontrar la solución cromática adecuada. Los promotores de hoy en día todavía no tienen un trabajo sistemático con los arquitectos, que como autores deberían dirigir la construcción desde la fase inicial del proyecto hasta la final.
Los usuarios de Internet, por su parte, comparan las casas pintadas con "gallos de pelea" o con una chica inepta que sólo estropea su belleza con "pintura de batalla". (La foto de abajo muestra un barrio residencial de Novosibirsk).
Los propios vecinos se quejan de que los colores vivos ocultan a menudo la ruina y el mal estado de la fachada.
Pero por otro lado... ¡Piensa en el aspecto del edificio más famoso de Rusia! "La estética de la colorida Catedral de San Basilio está en nuestros genes. Esto es arquitectura rusa", especifica Bernaskoni.
Al fin y al cabo, incluso el antiguo significado de la palabra "rojo" en ruso era "hermoso". Por eso la plaza principal del país es roja.
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